El principio del fin de ‘Juego de tronos’
Tres dragones, un ejército zombi, 174.373 muertes y 67 capítulos después, llega el principio del fin de Juego de tronos. Estos nuevos episodios cerrarán, a partir de la próxima madrugada (HBO España y Movistar +) y hasta el 19 de mayo, la trama que comenzó en abril de 2011 y que se ha convertido en la mayor serie de la historia de la televisión. Un fenómeno, con sus acérrimos seguidores y más de un detractor, que ha marcado varios hitos que tardarán en superarse en términos de audiencia, presupuestos, narrativa, premios y globalización. Y que ha consolidado el género fantástico en la primera línea del entretenimiento televisivo.
La octava y última temporada tendrá menos episodios, seis, pero los cuatro últimos con una duración de alrededor de una hora y veinte minutos. La historia de Juego de tronos ya era famosa antes de que los guionistas y productores David Benioff y D. B. Weiss la convirtieran en serie para HBO. Las cuatro novelas de George R. R. Martin, de la saga Canción de hielo y fuego habían vendido millones de ejemplares.
Una docena de intérpretes se han hecho famosos dando vida a los ya clásicos Jon Nieve, Daenerys Targaryen o los hermanos Lannister en su lucha por ocupar el trono del reino de Poniente. En 2011 la mayoría eran desconocidos y entonces no sabían muy bien donde se metían, “Al principio pensé que tenía un gran personaje en un mundo loco, no sabía cómo la gente iba a navegar en este mundo de fantasía. El guion era excitante, aunque no podía recordar qué personaje era cual con esos nombres tan raros”, comenta Nikolaj Coster-Waldau (Jaime Lannister) durante una entrevista en Londres. Isaac Hempstead-Wright, Bran Stark en la ficción, era un niño de 10 años cuando comenzó la serie. “No leía los guiones. Mi madre me dijo, ‘te tiran de una torre‘, y yo dije: ‘¡guay!’. Fue como un campamento de verano increíble, escalando, montando a caballo... me lo pasé genial”, apunta el joven actor.
Algo en lo que todos coinciden es que lo que les convenció fue la escritura de los guiones. “Ni estaba familiarizado con los libros. La secuencia que me mandaron para el casting me pareció que estaba muy bien escrita. Pensé, la escritura es buena, y Sean Bean [que actuó en la primera temporada] está en ella, actor que le dio a la serie credibilidad en su inicio”, apunta John Bradley-West, Sam Tarley en la serie. “Yo no había trabajado antes, acababa de salir de la escuela de interpretación, así que lo que me atrajo fue que era un trabajo, ni siquiera era plenamente consciente de que era HBO, lo único que quería era no avergonzar a mi agente”, finaliza.
Las series generalmente decaen en audiencia con el paso del tiempo. Esta ha pasado de una media de 2,52 millones de espectadores en EE UU en su primera entrega a 10,26 de la séptima y penúltima hace ya un año y medio. A lo que habría que sumar otros tantos millones en todo el mundo. Los presupuestos por temporada han pasado de los cinco millones de euros de media por capítulo en 2011 a los nueve en 2019. Rodada a lo largo de sus ocho temporadas en Irlanda del Norte, España, Islandia, Canadá, Malta, Marruecos y Croacia, ha creado una conversación global. En tiempos en el que la oferta a la carta y por streaming parece haberse instalado, HBO ha mantenido el éxito con una ficción que se ha consumido semana a semana y cuyos momentos más impactantes han sido comentados por miles de usuarios en las redes sociales. Con polémicas incluidas, en especial por las escenas de sexo y desnudos, en su mayoría femeninos, en sus primeras temporadas.
La caja con las primeras siete temporadas de Juego de tronos en DVD y Blu-Ray que HBO presentó en Londres.
“Parte de por qué la gente está tan volcada con Juego de tronos y por qué hacen teorías de qué va a pasar es que la serie rompe con las reglas de la narrativa. No matas al personaje principal en la temporada uno, no matas a gente para nada o haces un capítulo como el de la [sangrienta y mortal] Boda Roja y tomas caminos inesperados. Esto es como un evento deportivo, cualquier cosa puede pasar, no sigue una lógica. Y eso es precioso”, afirma Kristofer Hivju, el barbudo pelirrojo Tormund en la pantalla, durante la presentación de los DVDS y Blu-rays de la octava temporada (que saldrán a la venta en el último tercio del año) y de la nueva caja que contiene las primeras siete.
Juego de tronos ha conseguido 47 premios Emmy con 132 candidaturas. Aparte de las novelas originales, se han publicado tomos enciclopédicos, libros de ilustraciones, calendarios, relatos cortos, cómics y libros de cocina, política o filosofía. Y el fenómeno continuará a menor escala con otra serie, cuyo episodio piloto está ya en preproducción, ambientada miles de años antes, que contará con Naomi Watts como protagonista y estará producida por Jane Goldman (productora de películas como Kick-Ass y Kingsman) y el propio Martin. Como pronto tendrá su estreno en 2020, pero HBO trabaja también con otras ideas para hacer más series relacionadas con el universo de la saga, pero no ha confirmado nada. Así que el estreno de la octava temporada igual no es el principio del fin, solo un punto y seguido en Poniente.