Los templarios vuelven a tomar Levante
Eran monjes y guerreros. Pero también arquitectos, alquimistas y prestamistas. Han sido considerados los primeros banqueros transeuropeos y precursores de las actuales tarjetas de débito. Crearon incluso su propio código secreto para encriptar mensajes. Conocimientos y virtudes sobre los que los caballeros templarios forjaron, entre mitos, leyendas y misterio, un poder incuestionable. El mismo que contribuyó a un final precedido de la persecución alentada por acusaciones de herejía. Ingredientes que, sumados a un legado patrimonial rico y susceptible de convertirse en plató de rodaje, resultan suficientes para inspirar una producción audiovisual.
De esa convicción nace Territorio Templario, la serie documental original que estrena Canal Historia el lunes 24 (22.00 horas), y que busca a lo largo de seis capítulos arrojar una nueva visión sobre una de las órdenes militares cristianas más poderosas de la Edad Media. Tejer, con las hipótesis de una veintena de expertos, un listado de respuestas y de visiones múltiples ante las miles de preguntas que rodean a los enigmáticos caballeros de la Orden del Temple.
La producción es una retrospectiva histórica que pone la mirada en los hechos acontecidos hace 900 años y que invita a un recorrido por las fortalezas, castillos, iglesias y sepulcros de uno de los enclaves con más concentración de restos templarios: el Maestrazgo castellonense. Un territorio captado en toda su inmensidad gracias a los planos con drones que salpican los diferentes capítulos y que con la incorporación por primera vez de recursos de animación como elementos de recreación ayudan a acelerar el relato, avanza el director de producción, Javier Boo. No obstante, la producción sobrepasa la provincia y descubre otros restos de la Orden situados en Valencia, Huesca, Teruel, Tarragona, Mallorca o Francia.
Territorio Templario es “lo más importante que vamos a estrenar este año en Canal Historia, nuestra mayor apuesta de producción propia para este 2018”, asegura Sergio Ramos, vicepresidente de programación del canal documental líder de la televisión de pago en España, presente en 160 países y con 330 millones de abonados en todo el mundo. Cifras que no pasaron desapercibidas para la Diputación de Castellón, que vio en esta plataforma la mejor vía para difundir el legado templario castellonense y consolidarlo definitivamente como recurso turístico. “Sabíamos que nuestra provincia anda plagada de recuerdos y elementos de la más poderosa orden de la historia, de los guerreros que más poder acumularon”, incide el presidente de la diputación, Javier Moliner. En el margen de un año desde que se iniciaran los contactos, el proyecto es una realidad. “Es la primera vez que se hace una colaboración a este nivel con una institución pública”, apunta por su parte Ramos.
La serie es un viaje por la historia que usa como escenario veinticinco vestigios de la Orden del Temple de once localidades de Castellón. De Alcalà de Xivert a Culla, Benassal, Ares y Morella. De Les Coves de Vinromà a Sant Mateu, Albocàsser, Atzeneta y Burriana. Un círculo que cierra Peñíscola y su castillo, el último del Temple, adquirido en propiedad tras el canje de varias posesiones y rentas en Tortosa y convertido por Benedicto XIII de Aviñón, el Papa Luna, en su sede pontificia. Sobre esta fortificación que la orden levantó en apenas trece años -entre 1294 y 1307- sobre la antigua alcazaba árabe gira el primer capítulo de la serie. Un punto de partida simbólico, porque fue este castillo -“que sugiere más preguntas que respuestas puede dar”, indica uno de los expertos en la serie- el elegido por los templarios para su final. El mismo cuyos muros los convirtió en leyenda. Hasta hoy.
De la maldición del viernes 13 a las tarjetas de débito
“No es un documental pesado, sino entretenido y cargado de anécdotas”, asegura el director de producción de Territorio Templario, Javier Boo. Animación, drones y recreaciones en las que se han volcado hermandades e historiadores para verificar hasta el mínimo detalle en armamento y vestimenta ayudan a construir un relato ágil sobre una época histórica con demasiadas sombras. También contribuye al atractivo de la serie la cantidad de anécdotas vinculadas a los templarios que reúne, y que actúan de puente entre ese pasado y el presente. Avanzados a su tiempo, los templarios fueron los precursores de las tarjetas de débito, financiando en su recorrido a los peregrinos del Camino de Santiago. Estos hacían un depósito de dinero al inicio y en ese momento se les entregaba un documento encriptado con el que podían disponer de efectivo en cualquier dominio de la orden. La serie desvela también cómo la maldición del viernes 13 que pervive hoy se gesta un viernes 13 de octubre de 1307, cuando el rey Felipe IV de Francia llevó a la Orden del Temple ante la Santa Inquisición.