Mara Torres: “En la radio suena la vida”
El suyo ha sido un viaje de ida y vuelta. La periodista y escritora Mara Torres regresa este lunes a las ondas de la radio tras 12 años volcada en la televisión con un programa que ha ido construyendo artesanalmente desde sus cimientos. “Cuando me fui a La 2 Noticias dije que no cambiaba un medio por otro, sino un proyecto por otro. Y ahora igual. Me motiva la posibilidad de inventar un programa entero para las noches de la radio, desde el título a los contenidos”, asegura Torres, en capilla, concentrada, pocas horas antes de salir a antena en las madrugadas de la cadena SER con El faro (de lunes a jueves, entre la 1.30 y las 4.00).
Tras haber reivindicado una televisión pública independiente y plural a través de las protestas articuladas en torno a los viernes negros, abandonó RTVE en julio, coincidiendo con el inicio de un tempestuoso proceso que desembocó en la llegada de Rosa María Mateo como administradora única de la corporación. Torres confiesa que la nueva dirección le ofreció “todo lo que puede querer alguien que presenta un informativo para esta nueva temporada”. Se muestra por ello “muy agradecida”. Pero admite que le resulta mucho más motivador El faro y su regreso a la radio.
En la SER ocupará el hueco que en los últimos 28 años ha abrazado al ya mítico Hablar por hablar, esa versión moderna y urbanita de lo que en otros tiempos significó el consultorio de la legendaria Elena Francis. Lo que ambos formatos ofrecían al público ha sido engullido ahora por Twitter y Facebook. Las redes sociales se han adueñado de la intimidad, como alerta Evgeny Morozov, firme defensor del derecho a desconectarse.
Torres considera que la tecnología ha cambiado el concepto de intimidad. “La revolución de las redes sociales ha hecho que sea más fácil compartir algo con el resto de las personas y encontrar compañía y solidaridad. Antes el único canal que existía para eso era la radio”, afirma la periodista. Formatos de éxito como los de la señorita Francis, Encarna Sánchez o Hablar por hablar —creado por Gemma Nierga— estaban basados en esa fórmula que ha enganchado al público durante décadas. “Ahora más que nunca un medio necesita la interacción con los oyentes, porque su aportación enriquece infinitamente a un programa”.
De su etapa en Hablar por hablar, un formato que dirigió durante seis años, la periodista aprendió dos cosas fundamentales: “La primera, a escuchar, y la segunda, que hacer un programa con oyentes te abre un mundo de posibilidades infinitas. Porque yo puedo tener una idea, pero entre todos podemos tener mil ideas y ahora vamos a tener la oportunidad de compartirlas. El faro es un programa que vamos a hacer entre todos”.
Su nueva andadura en la madrugada parte de una premisa: “Cada faro es único en el mundo porque tiene una señalización lumínica que lo identifica. Siguiendo su estela, El faro será único porque girará sobre un asunto distinto cada noche: temas cotidianos como la mesa, el pan, la figura del padre o la cama, pero también sobre el paso del tiempo, el amor, la vejez o el deseo. Entre el equipo del programa y los oyentes iremos construyendo un programa con las múltiples posibilidades que da cada tema, desde la más intelectual a la más casera”.
En su estreno, esta noche, El faro gira sobre el faro de la mano de un vigilante de la torre costera de Sálvora, una isla deshabitada en la ría de Arousa, que ha guiado a los navegantes durante más de 40 años; del poeta Antonio Lucas y del escritor Javier Sierra. Todo adobado con la complicidad de los oyentes, llamados a relatar sus historias alrededor de los faros y del mar. En la radio como en El faro cabe todo. Los temas más filosóficos y también los más domésticos, música de culto y sonidos callejeros. Porque, en la radio, “suena la vida”, dice Torres.