Cerro Bayo: cómo es el centro de esquí boutique de la Argentina
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EsquíVilla La AngosturaNeuquénViajesTurismoSon las 11 de la mañana y los grupos de principiantes en la pista 1 siguen las indicaciones de los instructores: quitar excedentes de nieve de las botas para calzarlas luego en los esquíes, remontar unos metros la pendiente haciendo “la escalera”, con los pies perpendiculares al plano inclinado, acomodarse con ayuda de los bastones y deslizarse, finalmente, haciendo la famosa cuña, para que el descenso adquiera una velocidad controlada.
Entre carcajadas, caídas y algunas caras de pánico, la escena se desarrolla a 1.500 m.s.n.m., en el Cerro Bayo, a 15 minutos de Villa La Angostura, provincia de Neuquén.
Cerro Bayo tiene 200 hectáreas de superficie esquiable, en Villa La Angostura,
Con vistas al lago Nahuel Huapi y a los Andes, el centro de esquí se despliega como un espacio ideal para familias. Sus casi 200 ha de superficie esquiable y su infraestructura hacen que los visitantes se sientan como en casa.
Bayo resulta particularmente amable con los novatos que, a diferencia de otros centros, cuentan con nieve toda la temporada porque las pistas para principiantes están en la cota 1.500 y no en la base. Entre los “fuertes” del lugar también están las actividades para chicos, el esquí adaptado y la buena gastronomía.
Carro Bayo, Villa La Angostura, con actividades para toda la familia.
Pequeños esquiadoresCopitos y Bayitos se llama la escuelita de esquí y snowboard para chicos de 4 a 6 y de 7 a 12 años. Guiados por uno o dos instructores, los grupos de cinco a diez niños que hacen sus primeras bajadas en la nieve o que perfeccionan su nivel están entre los protagonistas más adorables del centro.
Primeros pasos en el esquí, en la escuelita de Cerro Bayo.
Mientras que los adultos principiantes intentan una y otra vez hacer la cuña con los esquíes, los niños reciben la orden de formar una “casita” con sus tablas. Sin dudas esa metáfora, sumada a la enorme capacidad de aprendizaje de los chicos y elasticidad, surte mejores efectos que la de los grandes. Y allí van, uno detrás del otro, con sus coloridos cascos y camperas, en perfecto zigzag detrás del instructor.
Mientras los padres toman clases o esquían por su cuenta, los chicos también disfrutan del parque de nieve de la escuelita y del miniterrain park, donde los adolescentes mejoran su técnica con saltos y rails.
Otra de las novedades de esta temporada es la Let It Snow Training Samsung School, con experiencias de realidad virtual.
Una opción para cada unoEl concepto “para toda la familia” también se evidencia en las actividades que el cerro Bayo propone para quienes no esquían. Una de ellas es el snow tubing, diversión y adrenalina garantizada a bordo de unas “donas” (gomones) inflables que giran a medida que la gravedad hace de las suyas.
Una "ventana" al Nahuel Huapi (Cerro Bayo)
Otra opción, bastante más tranquila, es disfrutar de una caminata guiada con raquetas e internarse en los bosques de lengas que rodean las pistas de esquí. En salidas de una o dos horas los visitantes pueden admirar las vistas panorámicas y sorprenderse con aves típicas de la zona como la cachaña, el loro más austral del mundo.
El esquí adaptado también está entre las particulares actividades que ofrece el centro: acompañados por un instructor, las personas con alguna discapacidad física, mental o sensorial acceden a clases personalizadas y gozan del deporte y el entorno.
Cocina de montañaLos refugios gastronómicos representan otro punto destacado del Bayo. En la base del cerro, Amex Snow House inauguró esta temporada -en el primer piso- el Espacio Aramburu, un salón exclusivo para 16 personas. Con el chef Gonzalo Aramburu a la cabeza, el restaurante propone un menú por pasos, con delicias como croquetas de cordero braseado y mollejas de cordero a la leña. En la planta baja, los platos, ligados a la idea de confort food, incluyen sopas, guisos, carnes a la parrilla, fondues de chocolate y queso. El lugar está abierto de 9 a 18 y su deck resulta ideal para tomar una cerveza o un vino tras la jornada de esquí.
A los 1.500 metros sobre el nivel del mar, el centro ofrece tres opciones para almorzar o merendar, representadas por Oso Point, Altitud y Tronador, todas a una corta distancia de las pistas para principiantes. Con especialidades regionales, los restaurantes son un oasis con el mejor paisaje en sus ventanas.
Además de esquí, juegos en la nieve (Cerro Bayo).
Y si de panorámicas se trata, nada como El Capricho, un mágico rincón donde relajarse, en la cumbre de la montaña, a 1.800 metros.
La buena cocina también se encuentra a los pies del cerro, en Villa La Angostura, con opciones de primer nivel como la tasca Plácido, especializada en mariscos; Tinto Bistró, que además de sus platos se destaca por su vinoteca; y el restaurante Viejos Tiempos, con exquisiteces como cordero braseado al malbec.
Deporte, aventura, contacto con la naturaleza, diversión y gastronomía inolvidable parecen ser los ingredientes que hacen de Cerro Bayo una verdadera experiencia para los sentidos. Dicen que quien aprendió a esquiar en un centro vuelve las siguientes dos temporadas a ese mismo lugar. Será cuestión de probar.
Panorámica de Cerro Bayo, Villa La Angostura.
MINIGUÍACómo llegar. Aerolíneas tiene de 8 a 12 vuelos diarios directos hasta Bariloche (2 hs. 20’); ida y vuelta con impuestos, desde $ 2.809. Micro común Vía Bariloche o Albus de ahí a Villa La Angostura (1 h. 15’), $ 130 ida.
Dónde alojarse. Hostería Huenu, en Puerto Manzano. Habitación doble con vista al jardín y desayuno, desde $ 2.800. Suite con hidromasaje, desde $ 3.800 (www.huenu.com.ar; reservas@huenu.com.ar).
Cuánto cuesta. Medios de elevación (hasta el 1/9): peatón mayor, $ 650; menor, $ 520; 7 días mayor, $ 5.950; 7 días menor, $ 4.760. Escuela adultos (3 días): $ 2.815. Escuela niños (3 días): $ 3.740 (www.cerrobayo.com.ar)
Dónde informarse: (0294) 449-4124.
villalaangostura.gov.ar / neuquentur.gob.ar
María de la Paz García / Especial